La Gran Senda de La Axarquía, en la provincia de Málaga, ha incorporado en sus cuatro etapas unos doscientos objetos escondidos para que sean localizados mediante el 'geocaching', un juego de búsqueda de 'tesoros' ocultos al aire libre, al modo de yincana.

El vicepresidente de Infraestructuras y Territorio Sostenible de la Diputación de Málaga, Cristóbal Ortega, entidad impulsora de la iniciativa, ha explicado que la Diputación tiene activos unos 200 ‘caches’ u objetos colocados en esas tres rutas de senderismo y que tienen que descubrir los participantes en este juego. Se trata, por tanto, de una manera lúdica de recorrer espacios naturales y de estar en contacto con otras personas de aficiones similares.

Por ello, Ortega ha destacado que el ‘geocaching’ es un magnífico recurso para promocionar el entorno natural de la provincia a través de la Gran Senda y, a su vez, para que los practicantes de este juego, que cada vez son más numerosos y provienen de distintas provincias, conozcan los pueblos del interior.

El 'geocaching' empezó como un entretenimiento de un grupo de especialistas en tecnología de geoposicionamiento y, en la actualidad, es un juego que se practica a nivel mundial y que cuenta con unos tres millones de seguidores.

Para poder realizarlo hay que contar con un receptor con GPS, ha informado este domingo la Diputación de Málaga en un comunicado.

Quienes quieran participar y jugar deben registrarse primero en www.geocaching.com y descargarse la aplicación Geocaching a través de Google Play o la App Store de Apple.

A partir de ahí, se puede contar con la información necesaria para encontrar los objetos en función de la dificultad de localización.

Antes de las etapas de la comarca de la Axarquía ya se habían incorporado a este juego, dentro de la provincia de Málaga, el Bosque de Cobre y a la Gran Senda de la Sierra de las Nieves.